Por Juan Tomás Valenzuela
La reducción de la pena
a Marlin, por homicidio,
la libraría del presidio,
pero no de la condena.
El otorgarle a esta hiena
una pena favorable,
no evita la detestable
animadversión que siente
el pueblo contra esta gente
de conducta despreciable.
Que despachen a esta arpía
tan solo al cumplir dos años,
no la eximirá del daño
que le hace a la sitiería.
Ni ella ni su cofradía
van a salir bien parados,
pues aunque usen el Estado
como campo del delito,
arriba hay un Dios bendito
que va a estar de nuestro lado.
Tal vez Marlin, salga ilesa
de la muerte de esta niña,
pero esta ave de rapiña
no se va a salir con esa.
No sé si será Teresa,
la madre que la parió,
o el Partido que la usó
como brazo delincuente,
pero ni ella, ni su gente
se librarán de este fó.
Aunque ya el Procurador,
un hombre en quien nadie cree,
se alinea por esta vez
del lado de la menor,
su respaldo al malhechor
que gobierna este país,
permitirá a esta lombríz
salir sin cumplir su pena,
aunque de la real condena,
no la salva ni Lilis.
Juan de los Palotes
16 Mayo 2019